El inicio de clases frustrado

      No hay clases,los maestros salvo los de Capital Federal  siguen en su lucha con el Gobierno para obtener un aumento que les permita ganar como mínimo $ 3.100. Ayer el gobierno cerró las tratativas ofreciendo $ 2.800, y se retiró de la negociación unilateralmente ( Ministro Sileone). Hoy el Gobierno ordenó acudir al Ministerio de Trabajo para que se levante la huelga.-( paritaria)-
       Dicen los maestros que una familia no puede vivir con $ 2.800 por mes cuando los maestros de Santa Cruz ganan $ 6.500 y los legisladores nacionales (diputados y senadores )  se aumentaron las dietas de $ 13.000 a $ 35.000 . Si es cierto , todos los maestros no son iguales ante la ley y el aumento de lols legisladores es altamente desproporcionado. Tambien cuestiónan que la Jefa de Estado haya comentado que sólo trabajan cuatro horas diarias y tienen tres meses de vacaciones en su alocición de 3 horas 15 en la apertura de sesiones tildando esa actitud a falta de información.
      Si fuera tan así habría que reformar la Ley de Educación,pero todos los maestros deberían ganar lo mismo. Estoy convencido que ejercer la educación es un apostolado y que la Educación es una de las cuatro patas fundamentales  de las que se sostiene  una sociedad moderna ,junto con la Justicia,  la Educación y la Salud - va por los médicos y las enfermeras de los hospitales- Hay que recordar tambien que los maestros llevan trabajo a casa, hacen doble turno y continuamente cursos de perfeccionamiento.
Hay que educar bien a los niños,para no tener que castigar a los adultos,decían los griegos hace cuatro mil años,y de ello algo sabían.
      Los maestros dicen que ellos quieren negociar en noviembre o diciembre los nuevos sueldos del año siguiente siguiendo los pasos marcados por los indices inflacionarios,pero siempre sucede que se abren las conversaciones diez días antes del inicio de clases y no alcanza para negociar. Estiman que el único recurso constitucional que tienen es el derecho a huelga , y no tendría que ser así porque el maestro es el segundo padre, y la escuela el segundo hogar,hace lo aprendí yo hace sesenta años con  aplicación y respeto.
      Deseo que los maestros sean los segundos padres y no que se conviertan en " trabajadores de la educación"., debiendo recurrir a huelgas y marchas de protesta.
      El estado debería tomar cuenta de esta situación tan desagradable y solucionarla en tiempo y forma antes que estalle el conflicto no querido por alumnos, padres y los maestros,porque ellos sólo aspiran a un sueldo digno y a cumplir con la obligación de educar al soberano.